Las camillas son esenciales en primeros auxilios para el transporte seguro de pacientes. Hay distintos tipos de camillas, cada uno con características específicas:
Las camillas Scoop están diseñadas para trasladar a los pacientes sin tener que levantarlos completamente del suelo. Este tipo de camilla se divide longitudinalmente y puede colocarse alrededor del paciente, minimizando el movimiento, lo que es crucial en casos de sospecha de lesiones medulares.
Las camillas rígidas, normalmente fabricadas con materiales robustos como aluminio o plástico reforzado, se utilizan en situaciones en las que se necesita una base estable y segura para el paciente. Son ideales para situaciones de rescate en entornos difíciles o para el transporte por terrenos accidentados.
Las camillas plegables ofrecen una gran versatilidad gracias a su capacidad para compactarse y transportarse fácilmente. Estas camillas se utilizan a menudo en entornos urbanos o en situaciones en las que el espacio de almacenamiento es limitado.
Estas camillas están diseñadas específicamente para su uso dentro de ambulancias. Están equipadas con sistemas de sujeción para garantizar la seguridad del paciente durante el transporte y a menudo incluyen mecanismos de elevación para facilitar la carga y descarga.
Las camillas de vacío, o colchones de vacío, se utilizan para inmovilizar totalmente a pacientes con sospecha de fracturas múltiples o traumatismos graves. Funcionan eliminando el aire del colchón para adaptarse a la forma del cuerpo del paciente, proporcionando un soporte rígido y personalizado.
Elegir la camilla adecuada depende de la situación y el estado concretos del paciente. Cada tipo de camilla tiene sus propias ventajas y limitaciones, y es esencial que el personal de rescate reciba la formación adecuada para utilizarlas correctamente. Para más detalles sobre los productos y los que pueden ser más útiles en tu sector, visita PVS S.p.A.